En muchas ocasiones, la comida chatarra se utiliza como vía rápida de nuestro cuerpo para hacer frente a un mal día por la serotonina que se crea al consumirla, y por lo tanto una hamburguesa puede ser una buena opción para sobrellevar un mal día siempre y cuando el resto de la dieta sea equilibrada y saludable, pero no debería ser el único mecanismo del que dispongamos cuando sufrimos una época mala o con más estrés.
Hemos hablado anteriormente de cómo el ejercicio es una gran forma de producir serotonina, aliviar el estrés y conseguir un estado de calma mental de una forma totalmente saludable. La serotonina está relacionada con la sensación de bienestar, alegría y calma, por lo que el deporte puede ayudar a mejorar el estado de ánimo y reducir los síntomas de depresión y ansiedad. Además de la serotonina, el deporte también libera otras hormonas como las endorfinas, que tienen efectos analgésicos y antidepresivos.
Pero todavía hace falta hacer más pedagogía al respecto. Porque todavía hay muchas personas que desconocen el poder antidepresivo del ejercicio físico y optan por las hamburguesas. Es un tema de mentalidad y de comunidad. Todavía está más normalizado pedir comida rápida para salir de ese mal momento que apuntarse al gimnasio o salir a correr y eso es un trabajo que queda por hacer.